Oraciones por la generosidad

Agradecimiento y alabanza al comienzo de un día

Padre celestial, qué privilegio es poder dejar este día en Tus buenas y misericordiosas manos. Gracias, pues Tu amor por mí se renueva cada mañana y porque, sin importar los errores que haya cometido ayer, has prometido jamás fallarme ni desampararme. Gracias porque Tus promesas de fidelidad son inquebrantables, ya que todas son Sí y Amén en Jesucristo.

Ayúdame a mantener los ojos de mi corazón puestos en Jesús, y hazme seguir caminando en obediencia a Tu propósito para mi vida. Hazme estar siempre alerta a la verdad de que eres mi ayuda segura y permanente en los momentos de angustia, así como mi cántico en los momentos de alegría.

Ayúdame a recordar que mi cuerpo es templo del Espíritu Santo, y hoy no me dejes quejarme ni reclamar, más bien déjame deleitarme en Ti, para que así me uses según Te plazca.

Glorificado sea Tu nombre hoy. Hágase Tu voluntad en mi vida, y nunca me dejes olvidar el maravilloso sacrificio que hiciste en la cruz de El Calvario, cuando diste la vida en rescate por mí, y porque al haber muerto, puedo vivir contigo para siempre. Gracias por el privilegio de ser Tu hijo. No soy lo suficientemente digno de recoger las migajas que hay debajo de Tu mesa; sin embargo, me has sentado junto a Cristo en lugares celestiales por el solo hecho de creer en el Señor Jesucristo como mi Salvador. Aleluya, alabado sea Tu santo nombre,

Amén.

Agradecimiento y alabanza al comienzo de un día

Padre celestial, qué privilegio es poder dejar este día en Tus buenas y misericordiosas manos. Gracias, pues Tu amor por mí se renueva cada mañana y porque, sin importar los errores que haya cometido ayer, has prometido jamás fallarme ni desampararme. Gracias porque Tus promesas de fidelidad son inquebrantables, ya que todas son "Sí" y "Amén" en Jesucristo.

Ayúdame a mantener los ojos de mi corazón puestos en Jesús, y hazme seguir caminando en obediencia a Tu propósito para mi vida. Hazme estar siempre alerta a la verdad de que eres mi ayuda segura y permanente en los momentos de angustia, así como mi cántico en los momentos de alegría.

Ayúdame a recordar que mi cuerpo es templo del Espíritu Santo, y no me dejes quejarme ni reclamar, más bien déjame deleitarme en Ti, para que así me uses según Te plazca.

Glorificado sea Tu nombre hoy. Hágase Tu voluntad en mi vida, y nunca me dejes olvidar el maravilloso sacrificio que hiciste en la cruz de El Calvario, cuando diste la vida en rescate por mí, y porque al haber muerto, puedo vivir contigo para siempre. Gracias por el privilegio de ser Tu hijo. No soy lo suficientemente digno de recoger las migajas que hay debajo de Tu mesa; sin embargo, me has sentado junto a Cristo en lugares celestiales por el solo hecho de creer en el Señor Jesucristo como mi Salvador. ¡Aleluya! Bendito sea Tu santo nombre,

Amén.

Oración de agradecimiento por haberme acompañado hoy

Cuánto Te amo, Señor Jesús, y tan solo quiero alzar mi voz de agradecimiento y gratitud por todo lo que eres para mí y por Tus muchas promesas hermosas que son sí y amén en Jesucristo mi Señor.

Has velado por mí todos los días de mi vida y cada momento de cada día. Tu mano de bendición se ha posado sobre mí desde el momento en que fui concebido. Me protegiste en el vientre, estuviste allí cuando tomé mi primer aliento y me acompañas en cada paso que doy. Has ido delante de mí pero a la vez estás detrás de mí, estás sobre mí y también debajo de mí, y me sostienes con la diestra de Tu justicia. Me acompañas y habitas en mí, y Te doy gracias porque antes de la creación del mundo me elegiste para que fuera Tu hijo.

Cuando tuve miedo, estuviste allí para consolarme, y cuando me caí, me levantaste y pusiste mis pies en la senda correcta. Cuando había tinieblas y oscuridad en el camino, iluminaste mi senda, y cuando la tristeza sacudió mi vida, estuviste allí para consolarme y auxiliarme. Y oh Señor, cuando fui infiel, con Tu gracia, permaneciste fiel y verdadero, pues no puedes negar Tu santo nombre.

Te amo, Señor, pues no hay nadie como Tú. Gracias porque eres mi Señor y mi Dios. Ruego en nombre de Jesús,

Amén.

Oración de agradecimiento porque la fidelidad de Dios se renueva cada mañana

Padre celestial, solo Tú eres digno de toda la adoración y la alabanza, y Te pido que las palabras de mi boca y las meditaciones de mi corazón Te honren y Te complazcan durante el día de hoy, pues eres un Dios grandioso y fiel.

Gracias porque a través de Cristo puedo acercarme a Tu trono de gracia dondequiera que me encuentre y en cualquier momento, pues a través de Él puedo ofrecerte mis oraciones y súplicas. Qué bendición saber que Cristo dio la vida por mí, para que a través de Él pueda entregarte mi vida en santidad y justicia todos los días.

Señor, quiero ser la persona que Tú quieres que sea, y Te doy gracias porque Tu fidelidad se renueva cada mañana. Mientras me adentro en este nuevo día, Te pido que, a través de Cristo, me permitas vivir los sucesos de mi día de una forma que sea aceptable para Ti.

Gracias por todas las promesas fieles y verdaderas que me has hecho a mí y a cada uno de Tus hijos. Hoy guíame hacia toda la verdad, y déjame tomar el camino de la justicia para Tu gloria y alabanza. Ruego en nombre de Jesús,

Amén.

Oración para que hoy se haga la voluntad de Dios

Santificado sea Tu nombre, Dios Padre, y glorificado seas en todo lo que hoy ocurra.

Padre, mientras enfrento otro día ajetreado, Te doy gracias porque has prometido acompañarme siempre, guiarme, orientarme, consolarme, sostenerme, sustentarme y darme fortaleza. Señor, ruego que, a pesar de que mi vida esté llena de actividad, Tú ocupes el primer lugar en todo lo que haga, y ruego poder someterme voluntariamente a Tu bondadosa orientación y guía.

Ayúdame a vivir el hoy en su máxima plenitud, y permíteme aprovechar cada oportunidad para vivir y caminar como Tú quieres que lo haga. Señor, enséñame hoy a ser un servidor y haz brotar en mí aquel espíritu bondadoso de humildad que era tan evidente en el Señor Jesús. Oh, Señor, haz brotar en mí un corazón limpio e infunde en mí un espíritu generoso y solidario que complazca Tu corazón. Señor, hoy déjame estar dispuesto y preparado para decir: "Hágase Tu voluntad, no la mía". Ruego en nombre de Jesús,

Amén.

Oración para recibir orientación durante el día de hoy

Padre Celestial, me arrodillo ante Ti en oración y alabanza. Guíame y oriéntame en todo lo que haga y diga hoy. Hazme caminar en espíritu y en verdad y ser sensible a Tu gentil orientación.

Ruego que me ayudes a poner los ojos en el Señor Jesús, pues sé que sin Él me apartaré enseguida de la senda que es mejor para mí. Señor, creo que has planificado cada día de mi vida, y no quiero apartarme de la senda que quieres que tome.

Ayúdame a serte fiel y a estar dispuesto a tomar la senda que Tú elijas, pues sé que esto podría entrar en conflicto con mis propios deseos y afanes. Haz brotar en mí un corazón que se deleite en hacer Tu voluntad, para que así los anhelos de mi corazón se ajusten a Tus planes y propósitos y a Tu voluntad para mi vida.

Deja que mis ojos estén siempre puestos en Ti, y no me dejes fijarme en las tempestades ni en las dificultades de la vida, pues sé que me acompañas para guiarme, orientarme y sostenerme, de manera de alabarte y glorificarte.

Gracias porque Jesús es el Camino, la Verdad y la Vida, y deseo que solo Él me guíe. Ruego en nombre de Jesús,

Amén.

Oración para recibir orientación el día de hoy

Querido Señor Jesús, gracias por haberme llevado a salvo al comienzo de este nuevo día. Gracias por haberme cuidado durante la noche, y ruego que hoy sea un día en que viva, me mueva y exista en Ti. Señor, ruego que las palabras que salen de mi boca, los pensamientos que se forman en mi corazón y las motivaciones tras todas mis acciones, palabras y pensamientos sean complacientes delante de Tus ojos y honren Tu nombre.

Señor, ruego que seas mi guía y mi limitador en todo lo que hoy diga y haga, para que así mis palabras y acciones no sean obra de mi carne, sino sean guiadas por las ordenanzas de Tu Espíritu Santo. Señor, ayúdame a caminar en espíritu y en verdad, y haz que mis ojos hoy se mantengan puestos en Jesús y que mis oídos estén abiertos a Tu suave susurro. Oh, Señor, ruego que seas glorificado en todo lo que haga.

Ruego que no me dejes caer en tentación y me liberes de todas las perversidades del día, y que hoy sea un día en que aprenda más de Ti, para así crecer en la gracia y el conocimiento de mi Señor y Salvador. A partir de ahora, ayúdame a caminar con humildad delante de Ti durante todos los días de mi vida. Ruego en nombre de Jesús,

Amén.

Oración para recibir orientación el día de hoy

Querido Señor Jesús, gracias por haberme llevado a salvo al comienzo de este nuevo día. Gracias por haberme cuidado durante la noche, y ruego que hoy sea un día en que viva, me mueva y exista en Ti. Señor, ruego que las palabras que salen de mi boca, los pensamientos que se forman en mi corazón y las motivaciones tras todas mis acciones, palabras y pensamientos sean complacientes delante de Tus ojos y honren Tu nombre.

Señor, ruego que seas mi guía y mi limitador en todo lo que hoy diga y haga, para que así mis palabras y acciones no sean obra de mi carne, sino sean guiadas por las ordenanzas de Tu Espíritu Santo. Señor, ayúdame a caminar en espíritu y en verdad, y haz que mis ojos hoy se mantengan puestos en Jesús y que mis oídos estén abiertos a Tu suave susurro. Oh, Señor, ruego que seas glorificado en todo lo que haga.

Ruego que no me dejes caer en tentación y me liberes de las perversidades del día. Que hoy sea un día en que aprenda más de Ti, para así crecer en la gracia y el conocimiento de mi Señor y Salvador. Por lo tanto, ayúdame a caminar con humildad ante Ti durante todos los días de mi vida. Ruego en nombre de Jesús,

Amén.

Oración para superar las dificultades de hoy

Dios Padre, sé que la senda por la que ando está llena de dificultades y problemas; sin embargo, Señor, confío en que me guiarás y me orientarás por el laberinto de la vida, pues has prometido acompañarme, guiarme, orientarme, darme fortaleza y ayudarme.

Nunca me dejes olvidar quién soy en Cristo, y ayúdame a confiarte todas las cosas, pues sé que soy Tu hijo y que el que está en mí es más poderoso que el que está en el mundo.

Gracias porque eres mi Pastor, y porque has prometido guiarme, orientarme, protegerme y sostenerme. Gracias, pues eres mi Defensa y mi Defensor, y porque has prometido ser mi ayuda segura durante las dificultades y las pruebas inesperadas.

Gracias, Señor, porque permaneces fiel y confiable, incluso cuando me aparto de la senda que bondadosamente has puesto delante de mí. Nunca me dejes olvidar que eres mi Ancla firme y la Roca sólida que me sostiene, y que ninguna dificultad de la vida es demasiado grande que no puedas superar. Gracias en nombre de Jesús,

Amén.

Oración para vivir hoy por Jesús

Querido Señor, Te doy gracias por haberme dado una noche de sueño reparador y por haberme despertado en el amanecer de este nuevo día. Ruego que me acompañes durante todo el día. Dame fortaleza y protégeme de todas las perversidades y los peligros, y ayúdame a ser digno del llamamiento que he recibido.

Si hay cargas, ruego que las lleves por mí, y si hay que tomar decisiones, ruego que me des el discernimiento y la sabiduría que necesito para tomar las mejores decisiones. Si me enfrento a un día ajetreado, ruego que este no me impida confiar en Ti como corresponde.

Si hoy pones a alguien en mi senda, ruego que me des las palabras y la sabiduría para decir lo que corresponde, así como el criterio para saber cuándo callar. Señor, dejo mi día en Tus manos. Ruego que vayas adelante de mí, me acompañes cada minuto del día y me mantengas a salvo bajo la sombra de Tus alas. Glorificado seas hoy en mi vida, para que así cuando los demás me miren, solo vean a Jesús en mí. Ruego en nombre de Jesús,

Amén.