Padre celestial, ruego que prepares mi corazón y me ayudes a ser diligente en mis estudios. Ruego que mi mente sea receptiva a las verdades que estoy aprendiendo, y ruego poder retener y recordar lo que leo, y comprender con profundidad todo lo que estoy aprendiendo.
Dame el profundo deseo de estudiar, hazme comprender mejor lo que estoy aprendiendo, y haz brotar en mí la capacidad de permanecer alerta en espíritu, alma y cuerpo durante este tiempo de intensa concentración. Y Señor, ruego que hagas brotar en mí un espíritu enseñable, una mente curiosa y la capacidad de aplicar lo que he aprendido en mi vida. Ruego en nombre de Jesús,
Amén.
Padre celestial, las cosas que hoy ocurren en el mundo empeoran cada vez más, tal como la Biblia dijo que pasaría en estos tiempos finales, y tenemos los ojos puestos en Ti para que nos digas qué hacer. Señor, tenemos los ojos puestos en Ti para que nos brindes conocimiento y sabiduría en un momento en que todo lo vinculado a Dios y a la devoción es objeto de graves ataques y se desvanece con rapidez.
Padre, sabemos que la Biblia es Tu Palabra de verdad, pero a pesar de esto, en las naciones está perdiendo su autoridad y respeto y ha sido reemplazada por un humanismo laico y un programa contrario a Dios. Padre, sabemos que el Señor Jesús vendrá pronto a juzgar a las naciones con justicia y verdad; sin embargo, rogamos que mientras esperamos Su pronto regreso, nos concedas Tu conocimiento y sabiduría para saber qué hacer y cómo comportarnos en un mundo que está fuera de control. Rogamos que Jesús venga pronto. Rogamos en Su nombre,
Amén.
Padre celestial, qué hermoso es saber que eres nuestro Dios. Señor, tan solo quisiera conocerte mejor y amarte más. Mi corazón anhela conocerte más y acercarse cada día más a Ti.
Mientras leo Tu Palabra y estudio las Sagradas Escrituras, ruego que me ayudes a aceptar todo lo que me quieres enseñar, y que hagas brotar en mí un espíritu enseñable que esté preparado para escuchar cómo Tu voz me habla y esté listo y dispuesto a responder a las gentiles ordenanzas del Espíritu Santo.
Tu Palabra dice que Tu pueblo fue destruido porque le faltó conocimiento y, Señor, ruego que me ayudes a leer, apreciar, aprender y digerir en mi interior todo lo que me quieres enseñar a través de las Sagradas Escrituras, pues quiero poder defender lo que hay en mi interior, y deseo compartir la verdad del glorioso evangelio de la gracia con todos mis conocidos. Dejo mi vida en Tus manos, y ruego poder vivir cada día para Tu gloria y alabanza. En nombre de Jesús,
Amén.
Señor Jesús, eres mi maravilloso ejemplo y de Ti proviene la sabiduría, el conocimiento y el entendimiento. Ruego que me des Tu conocimiento que es de lo alto, pues sé que el principio de la sabiduría es el temor al Señor y que de Tu boca proviene el conocimiento y el entendimiento.
Señor, no busco la sabiduría del mundo, pues sé que es una necedad delante de Tus ojos, más bien busco el conocimiento que solo de Ti proviene, pues Tu Palabra nos dice que es mejor buscar el conocimiento y el entendimiento del Señor que adquirir plata y mucho oro fino.
Dame un corazón humilde y un espíritu enseñable, pues confieso que en mí no mora el bien. Sin embargo, Señor, sé que con Tu poder divino nos has dado todo lo que necesitamos para vivir una vida piadosa a través de nuestro conocimiento de Jesús, quien nos llamó con Su propia gloria y bondad. Bendito sea Tu santo nombre,
Amén.
Querido Señor Jesús, eres el Dios inmortal, invisible, omnipotente y omnisciente, y eres digno de toda la alabanza y la adoración. Todas las cosas en Ti existen y subsisten, y no hay nada oculto a Tu vista. Me has hecho parte de Tu familia, me has cubierto con Tu manto de justicia y me has concedido las inescrutables riquezas de Tu maravillosa gracia, por lo cual alabo y agradezco Tu santo nombre.
Señor, nos dijiste que la vida se trata de conocerte cada vez más y de lograr un conocimiento y un entendimiento más profundos e íntimos sobre Ti hora tras hora y, Señor, Te pido que, con Tu gracia, me ayudes a comprenderte con mayor profundidad.
Dios absoluto y omnisciente, no hay Nada oculto a tu vista. Desde el comienzo, en Ti existió todo el conocimiento, ¡y Tu conocimiento seguirá resplandeciendo para siempre! Alabado sea Tu santo nombre.
Amén.
Querido Padre celestial, amo Tu Palabra y Te doy gracias por la sabiduría y el entendimiento que me has brindado generosamente.
Me encanta leer la Biblia y aprender sobre Ti. Me emociona conversar con los demás sobre Jesús y charlar sobre el evangelio de la gracia; sin embargo, a menudo no puedo acordarme de las verdades bíblicas que he aprendido ni las referencias bíblicas que he leído.
Señor, ruego que me ayudes a retener, recordar y acordarme de mis conocimientos bíblicos, para así poder acordarme de las hermosas verdades de Tu Palabra que he aprendido. Ayúdame a acordarme de los versículos bíblicos y retener las verdades bíblicas, y enséñame más sobre Tu amor y gracia. Ruego en nombre de Jesús,
Amén.
Querido Padre celestial, ruego que me des un corazón discernidor, un corazón honesto y verdadero que busque ponerte primero en todas las cosas, un corazón entendido y el deseo genuino de conocerte con mayor profundidad.
Señor, deseo caminar como es digno de Ti y poder conocerte mejor y amarte más. Dame sed de Tu Palabra de verdad, pues en ella hay vida, salud y plenitud, y al leerla y aplicarla podré vivir una vida que sea santa conforme al Señor; una vida que no se amolde al mundo.
Dame la fortaleza, la valentía y el poder para tomar las decisiones correctas en mi vida, y guía mis pensamientos con el poder de Tu Espíritu Santo día a día. Señor, sé que deseas la verdad en mis entrañas, y ruego que amoldes los secretos internos de mi corazón para dejarlos al descubierto ante Ti, de forma de poder crecer en la gracia y el conocimiento del Señor Jesús mientras me acerco cada día más a Ti. Ruego en nombre de Jesús,
Amén.
Padre celestial, soy una creación admirable, y cuando leo que conoces los pensamientos más profundos de mi corazón incluso antes de que broten en mí, que conocías todo acerca de mí cuando estaba en el vientre materno, y que has planificado cada día de mi vida, me lleno de admiración y asombro por Quién eres. Me deslumbra y a la vez me honra saber que el Dios del universo me conoce de manera tan íntima.
Señor, anhelo conocerte con mayor profundidad, comprender cada vez más Quién eres y establecer una relación más íntima contigo. Por tanto, ruego que, con Tu gracia y misericordia, me permitas conocerte de manera cada vez más profunda y comprender de manera más pura Tu bondad y Tu naturaleza santa.
Enséñame a vivir como Tú quieres que viva, y que todo lo que diga y haga sea conforme al Señor, para Tu gloria y alabanza. Úsame según Te plazca, y ruego que los demás puedan ver a Cristo en mí. Fue Juan el Bautista quien dijo: "Es necesario que Él crezca, pero que yo mengüe", y ruego que esta sea la experiencia de mi vida, hasta que Cristo sea todo en todos. En nombre de Jesús,
Amén.
Padre celestial, nos has dicho en Tu Palabra que si alguien carece del conocimiento y la sabiduría que necesitamos, debemos rogarte con fe, pues has prometido darnos de manera generosa a todos los que se acercan a Ti y confían en Tus promesas.
Señor, hay tantas cosas que no comprendo y ocurren tantas cosas en el mundo, que he venido a Ti a pedirte el hermoso don de la sabiduría y del conocimiento. Tu Palabra dice que Tu pueblo perece por falta de conocimiento, y ruego que me brindes todo lo que necesito para vivir la vida que Tú quieres que viva en espíritu y en verdad, y ser inocente como una paloma pero astuto como una serpiente.
Ilumina mi entendimiento y bríndame el conocimiento que necesito día a día, para así adentrarme en el futuro con la certeza de que cumplo Tu voluntad. Señor, tan solo Te pido que me brindes lo que necesito día a día, y confío en que supervisarás todas mis decisiones, y ruego que me guíes por la senda de mi vida, para Tu gloria y alabanza.
Mientras día a día estudio las Sagradas Escrituras, ruego que me enseñes Tus caminos y me empoderes para permanecer firme en el día malo, pues sé que Tu gracia basta para cada eventualidad que deba enfrentar. Gracias en nombre de Jesús,
Amén.
Amante Señor, deseo aprender más sobre Ti y tener un corazón y una mente que se enfoquen en Jesús. Anhelo crecer en la gracia y el conocimiento de Él; por lo tanto, ruego que hagas brotar en mí el profundo deseo de estudiar con diligencia Tu Palabra y aprender a aplicar sus verdades y principios en mi propia vida, para Tu gloria y alabanza.
Sin embargo, Padre, no solamente quiero tener un conocimiento intelectual de las estadísticas bíblicas, sino un conocimiento espiritual de la verdad bíblica y del amor piadoso. Quiero vivir mi vida de manera de complacerte y que me uses como testigo de Tu gracia y bondad y como un sacrificio vivo que sea completamente aceptable para Ti.
Ayúdame a leer y retener todo lo que aprenda de Tu Palabra, y enséñame a vivir como el Señor Jesús, en absoluta dependencia de Ti, para Tu gloria y alabanza. Ruego en nombre de Jesús,
Amén.
Padre, Te doy gracias por mi trabajo, pues sé que nos creaste para vivir vidas serviciales y productivas y a la vez atender las necesidades de nuestras familias.
Muchas cosas de mi vida laboral han cambiado, y mis conocimientos y habilidades profesionales deben actualizarse y mejorarse constantemente; por lo tanto, Señor, ruego que me brindes los conocimientos, la formación y las habilidades necesarios para seguir realizando mi trabajo de manera productiva y en la medida de mis capacidades.
Bendice el trabajo de mis manos. Ruego que protejas y atiendas a mi familia, y úsame para demostrar el amor de Jesús ante mis gerentes, colegas y compañeros de trabajo, de manera de glorificar a Cristo en todo lo que hago. Ruego en nombre de Jesús,
Amén.
Padre celestial, oramos por las escuelas y las familias cuyos hijos asisten a distintos establecimientos educacionales, y rogamos que tengas bondad y misericordia del personal y de los pupilos de las varias escuelas, universidades y centros de aprendizaje de nuestro país y de todo el mundo en general.
Rogamos que se enseñe la verdad en nuestras escuelas, y que el conocimiento verdadero y la sabiduría piadosa se hagan cada vez más evidentes en las clases y en las cátedras. Oramos por aquellos estudiantes cuya fe se ve debilitada por la sabiduría mundana, y rogamos que mantengas a estos jóvenes aferrados a los conocimientos bíblicos y a los fundamentos inmutables en los que basamos nuestra vida.
Dirige y gobierna las escuelas y los establecimientos educacionales de nuestra tierra, y permite que el personal y los estudiantes conozcan y comprendan la palabra de Dios y deseen la verdad. Rogamos en nombre de Jesús,
Amén.