Querido Señor Jesús, fuiste Tú Quien vino a buscar y a salvar lo que se había perdido y, Señor, en nuestro mundo actual hay muchas personas perdidas y heridas que deben cumplir medidas gubernamentales injustas y obedecer a gobernantes corruptos, cuyas decisiones suelen provocar profunda miseria y dolor. Ten misericordia de todos los que han sido tratados de forma injusta a través de medidas injustas, y ruego que tengas piedad y misericordia de ellos. Atiende todas sus necesidades, conforme a las riquezas de Tu misericordia.
Vuelve hacia Ti los corazones de aquellos líderes que se han despojado de los principios piadosos y que, en su soberbia, han seguido el camino del egoísmo y de la avaricia. Y Padre, con Tu gracia, Te pido que intervengas y tengas piedad de aquellos que son víctimas del maltrato y del abuso de la policía.
Señor, no dejes que intentemos abordar los males de este mundo desde una perspectiva humana, pues no solo luchamos contra la carne y la sangre, sino que contra principados, potestades y contra los gobernantes espirituales de este mundo oscuro. Sin embargo, doy gracias a Dios, Quien obtuvo la victoria sobre todos ellos a través de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.
Señor, sé que pronto regresarás para corregir todas las transgresiones y secar todas las lágrimas de nuestros ojos; por lo tanto, pongo ante Ti toda la injusticia del mundo actual y Te pido que, en Tu momento y a Tu manera, corrijas todas las transgresiones. Ruego en nombre de Jesús,
Amén.
Querido Padre celestial, eres mi Dios y mi Protector, y ruego que me ayudes, me salves y me rescates de aquellos que quieren hacerme daño. Señor, me están acusando falsamente, y siento que los que quieren desprestigiarme me persiguen como una manada de lobos hambrientos.
Oh Señor, he intentado hacer solo aquellas cosas que sean justas delante de Tus ojos. Si he agraviado o perjudicado a alguien sin motivo alguno, entonces tal vez se justifica su persecución implacable en contra de mí; sin embargo, Padre, he intentado vivir conforme a Tu voluntad, y aun así quieren hacerme daño y destruir mi reputación.
Señor, dejo esta situación en Tus manos todopoderosas, y ruego que me vindiques. Defiéndeme, Señor, y aleja de mi vida a estas personas que me han atacado de manera injustificada. Acércanos a Ti, pues al conocerte recibiremos vida, salud, paz y esperanza. Ruego en nombre de Jesús,
Amén.
Amante Señor, gracias por el maravilloso ejemplo de Tu vida, pues viviste en espíritu y en verdad. Una vida que demostró amor y justicia, una vida que se preocupó de toda la humanidad, sobre todo de aquellos que eran débiles, que estaban heridos o marginados, o de aquellos que se hundían en el pozo de la desesperanza o de la pobreza.
Mantente cerca de todos los que sienten los amargos vientos de la depresión y de la escasez en sus vidas, y sostenlos con el aliento cálido de Tu amor y gracia. Rogamos que no nos dejes juzgar de manera errónea a los que sufren aflicciones o que están sumidos en la pobreza. Danos una perspectiva más amplia de la vida y un corazón compasivo y bondadoso, sobre todo hacia aquellos que se sienten solos, no amados o abandonados.
Déjanos convertirnos en Tus ojos y oídos, y que Tu corazón de amor y gracia fluya a través de nosotros hacia los necesitados. Ten piedad de todos los que en este momento sufren la pérdida, la pobreza o la discriminación injusta, y rogamos que, en Tu momento oportuno, Tu justicia prevalezca en cada una de sus vidas. Gracias, Señor. Rogamos en nombre de Jesús,
Amén.
Padre eterno, nos creaste a Tu imagen y semejanza, pero el pecado ha pervertido las mentes de los hombres, y en todo el mundo abunda la injusticia, la indiferencia hacia los derechos de los demás y la responsabilidad personal.
Señor, cuando eres excluido del corazón y la consciencia de los hombres, el resultado inevitable es que la gente sufrirá y, Señor, en el mundo actual abunda la injusticia y la corrupción, no solo en la vida de las personas, sino que también en los pasillos del poder y en los salones de muchas naciones.
Señor, rogamos que corrijas todas las transgresiones que ocurren en nuestro mundo y vindiques a aquellos que son tratados de manera injusta. Padre, no dejes que intentemos hacernos cargo de los asuntos con nuestras propias manos, pues Tuya es la venganza y Tú pagarás. Sin embargo, Señor, rogamos que, con Tu gracia y misericordia, brindes justicia y paz a todos los que han sido tratados de forma injusta y cruel por sus semejantes, y que la injusticia y la indiferencia que han tenido que soportar sean el medio para acercarlos a Tus brazos salvadores de gracia. Rogamos en el hermoso nombre del Señor Jesús,
Amén.