Padre, creo que eres Tú el Que le brinda fortaleza a Su pueblo y lo bendice con paz y gracia, y Te doy gracias por todas las veces en que me has brindado la fortaleza para continuar y la tranquilidad para seguir confiando en Ti, incluso cuando la vida pareciera estar en un caos total.
Sigue brindándome Tu perfecta tranquilidad que sobrepasa el entendimiento humano, y ruego que me des la fortaleza para enfrentar las dificultades de la vida que a menudo pueden hacer que nuestros corazones desfallezcan por miedo a lo que se aproxima en la tierra. Con el poder de Tu Espíritu, ruego que me brindes la fortaleza para permanecer firme cuando llegue el día malo, pues sé que Tu gracia basta para todas las eventualidades, ya que Tu fortaleza se perfecciona en mi debilidad y en mi dependencia de Ti.
Señor, el mundo está sacudiendo los corazones de muchas personas; sin embargo, ruego que mi fe en Ti permanezca firme hasta el final, que mi paz en Ti jamás se quebrante y que me des la fortaleza suficiente para hacer frente a cada eventualidad que se presente en mi vida.
Aunque los montes se muevan y los collados tiemblen, ruego que mi amor inquebrantable por ti no se mueva y que Tu promesa de paz no tiemble. Gracias, pues mi fortaleza y mi paz solo están en Ti. En nombre de Jesús,
Amén.