Padre, hoy he venido a Ti porque me agobia la cantidad cada vez mayor de cargas, batallas, tensiones y angustias que parecieran acumularse en mi vida.
Señor, sé que eres fiel y verdadero, y ruego que tomes cada una de las cargas pesadas que hoy llevo, tal como lo has prometido. Señor, Te entrego cada situación estresante, cada palabra hiriente y cada circunstancia difícil de mi vida que pareciera agobiarme tan profundamente.
Has dicho en Tu Palabra que Tu yugo es suave y que ligera es Tu carga, y que si deposito en Ti todas mis preocupaciones y pongo todas mis cargas a Tus pies, mi alma hallará descanso. Señor, necesito ahora aquel descanso, pues estoy fatigado y agobiado; sin embargo, tengo los ojos puestos en Ti porque en Ti confío.
Déjame descansar junto a Tus aguas tranquilas de renovación y dormir en Tus brazos de consuelo. Ruego que me brindes aquella paz perfecta que solo fluye desde Ti hacia aquel cuyo pensamiento en Ti persevera. Ruego que mantengas mi corazón y mi mente enfocados en Jesús, y ayúdame a no sentir ansiedad por nada, sino a presentarte todas mis plegarias y súplicas con un corazón lleno de agradecimiento.
Gracias, pues eres un Dios bondadoso y fiel. Ruego en nombre de Jesús,
Amén.