Padre celestial, Tú sabes todo lo que he hecho en mi vida y cómo he eludido el tema de mi aborto, ignorado el significado de este pecado en mi vida e intentado fingir que no fue nada grave.
Sin embargo, Señor, ahora confieso ante Ti este horrible pecado y me doy cuenta cada vez más de que delante de Tus ojos es aborrecible abortar a una vida nueva. Confieso mis iniquidades y me duele pensar en el bebé no nacido que decidí eliminar de mi vientre.
Confieso mi pecado y me arrepiento de mi actitud indiferente, y ruego que Tu toque sanador se pose sobre mi vida. Ayúdame a entregarte este recuerdo doloroso y a aceptar Tu promesa de perdón a todos los que se arrepienten de sus pecados y se vuelven a Cristo.
Gracias porque pagaste el precio de todos mis pecados en El Calvario y porque prometiste alejarlos cuanto está lejos el oriente del occidente. Gracias, en nombre de Jesús,
Amén
Category:
Ruego que concedas mi súplica