Oración por un corazón puro y humilde

Padre celestial, el Mismísimo Señor Jesús dijo que bienaventurados son los puros de corazón; sin embargo, Señor, sé que a través de mí mismo jamás podré alcanzar el nivel de pureza que Tú exiges. Señor, sé que solo si permito que el Espíritu Santo viva en mí, haga su obra a través de mí, me enseñe y me instruya, alcanzaré aquella pureza de corazón que solo de Ti proviene, mientras me asemejo a la imagen del Señor Jesús.

Señor, durante mucho tiempo he caído en la actitud soberbia de compararme ventajosamente con los que me rodean, creyendo que era puro delante de Tus ojos. Sin embargo, ahora que me he dado cuenta de que el Señor Jesús es el único estándar con el que me comparas, me arrodillo con humildad ante Ti, a los pies de Tu trono, y Te pido que perdones mi soberbia autocomplaciente y mi egocentrismo. Déjame poner los ojos en Jesús y vivir tal como Él vivió en espíritu y en verdad, para así solamente buscar cumplir Tu voluntad y vivir una vida que Te honre.

Examina mi corazón y purifica mis pensamientos, y que Tu Espíritu Santo que habita en mí identifique cualquier soberbia y arrogancia que aceche en mi interior, mientras día a día me haces asemejarme a la imagen del Señor Jesús. Ayúdame a tomar las decisiones correctas en mi vida, aquellas decisiones que Te honren. Ruego en nombre de Jesús,

Amén