Padre celestial, fuiste Tú quien nos hizo hombre y mujer y fuiste Tú Quien nos dio una familia. Nos conocías incluso antes de que naciéramos, mientras nos formábamos de manera secreta en el vientre de nuestra madre.
Sin embargo, Señor, hay muchos hombres y mujeres cristianos que anhelan casarse, pero que se dan cuenta de que la persona que ansían conocer y con la que quieren pasar su vida pareciera nunca cruzarse por su senda y, Señor, hoy oro por todos aquellos creyentes que se encuentran en esta situación.
Padre, Te pido que tengas piedad y misericordia de todos los hombres y mujeres solteros que en su interior anhelan y desean casarse pero que siguen solteros. Ruego que tengas compasión de los deseos de sus corazones y traigas a su vida a una persona que Tú elijas, con la que puedan compartir su vida y su futuro.
Padre, ruego que durante esta espera, cuides sus corazones y mentes con la certeza de que conoces los deseos íntimos y las necesidades de sus corazones, y que, en Tu momento y a Tu manera, traigas a su vida a la persona que has preparado para ellos, ¡aquella persona para la cual también los has preparado! Derrama en cada uno de sus corazones la tranquilidad y la paz que solo pueden alcanzar aquellos que saben que sus años y su futuro están en las manos de Dios, y que están preparados para confiar cada parte de su futuro en Sus manos amorosas. Ruego en nombre de Jesús,
Amén.