Amante Señor, deseamos en este ministerio ensalzar el hermoso nombre del Señor Jesús y glorificar a nuestro Padre que está en los cielos. Rogamos que bendigas nuestro ministerio y que Tu Espíritu Santo guíe y oriente todo lo que decimos y hacemos. Haznos cambiar para asemejarnos cada vez más a la imagen de Jesús mientras buscamos seguir Su mandamiento; amar como Él nos ha amado.
Protégenos, Señor, de las asechanzas del enemigo que intenta destruir la buena obra que estás haciendo. Edifícanos en la unidad del Espíritu y transfórmanos para asemejarnos cada vez más a Cristo mediante la renovación de nuestra mente día a día.
Señor, no dejes que sigamos nuestros propios designios de la carne, sino que guíanos en todos los ámbitos de esta obra ministerial. Atiende todas nuestras necesidades, pues sabemos que eres Tú Quien ha prometido satisfacer todas nuestras necesidades conforme a las riquezas de Tu gloria.
Protégenos, guíanos, cuídanos y úsanos según Te parezca. Rogamos en nombre de Jesús,
Amén.