Dios misericordioso, queremos agradecerte por Tu amor y perdón hacia cada uno de nosotros, y Te alabamos y Te agradecemos porque somos Tus hijos y porque hemos nacido en Tu familia celestial. Señor, oramos por la unidad del cuerpo de Cristo, para que así podamos manifestar verdadera devoción de corazón y contentamiento y bondad en nuestras acciones y actitudes hacia el otro y hacia Ti.
Señor, no tenemos nada para recomendarnos a Ti, mas nos has vestido de Tu propia justicia. Que cada uno de nosotros se aleje con prontitud de aquellas cosas que Te disgustan, para así buscar la justicia, la devoción, la fe, el amor, la resiliencia y la gentileza.
Señor, ayúdanos a hacer lo posible por mantener la unidad del Espíritu a través del vínculo de la paz en nuestros hogares y nuestras comunidades religiosas, y rogamos que nos des la gracia para buscar con diligencia aquellas cosas que sean complacientes delante de Tus ojos, de manera de vivir en unidad el uno al otro, para Tu gloria y alabanza. Ruego en nombre de Jesús,
Amén.