Oración de dedicación al Señor

Padre mío, gracias por este hermoso bebé que bondadosamente me has encomendado amar, cuidar, enseñar y educar. Señor, deseo dedicarte este valioso niño, tal como Ana puso a Samuel bajo Tu cuidado. No me dejes ser demasiado posesiva e impide que me aferre demasiado a esta vida indefensa, sino que déjame darle la libertad para crecer sin desatender las responsabilidades de la paternidad/maternidad.

Dame sabiduría piadosa mientras crío a este niño, y ruego que se convierta en un gran hombre de Dios y que algún día lo uses de forma especial para glorificar Tu nombre.

Protégelo de todo daño y peligro, y ayúdame a educarlo con sabiduría y gracia de forma que tome la senda de la verdadera justicia.

Ruego que llegue a confiar en Jesucristo como su Salvador y que crezca en la gracia y el conocimiento del Señor Jesús, pues al conocerte recibirá vida eterna. No lo dejes caer en las tentaciones de esta vida y protégelo de las influencias de este sistema mundial, que puede destruir con mucha facilidad la fe pura de un niño joven y creyente.

Tal como el Señor Jesús creció en el conocimiento y la sabiduría y en el favor para con Dios y el hombre, ruego que de alguna forma mi hijo crezca en la sabiduría piadosa y halle gracia ante Tus ojos. Ruego en nombre de Jesús,

Amén.
“He aquí, don del SEÑOR son los hijos; {y} recompensa es el fruto del vientre.”