Padre amado, Te damos gracias por el nacimiento de Tu Hijo, nuestro Salvador Jesucristo, el Hijo eterno de Dios y el Hijo perfecto del Hombre, Que nació en un establo y vivió toda Su vida en humilde obediencia a Tu voluntad. Gracias por haberlo enviado para que fuera nuestro Salvador y muriera en la cruz de manera de pagar el precio de nuestros pecados.
Señor, en esta temporada navideña, oramos por todos aquellos hombres y mujeres que no Te reconocen como su Salvador, y rogamos que, con Tu misericordia y gracia, convenzas a muchos de que necesitan un Salvador.
Señor, sabemos que el mundo busca la paz, pero jamás habrá paz en este mundo hasta que Cristo tenga el poder. Y jamás habrá paz en el corazón del hombre hasta que el Señor Jesús more en los corazones creyentes. Rogamos que sigas haciendo Tu obra de convencimiento en los corazones de las naciones, sobre todo durante esta temporada navideña, y que muchos lleguen a reconocerte como su Salvador. Rogamos en nombre de Jesús,
Amén.