Padre celestial, estamos sufriendo la peor crisis inmobiliaria de los últimos tiempos, y sé que ninguno de nosotros está libre de perder nuestras casas forzadamente debido a un embargo, deudas, desastres naturales, colapsos bancarios e incluso personas inescrupulosas y gobiernos poco éticos.
Me lamento por todos los que han perdido su casa de una u otra forma, o que están en proceso de que les arrebaten su casa y que sus vidas queden arruinadas. Señor Dios, eres nuestro Proveedor y nos has prometido darnos Tu protección y provisión, y rogamos que tengas misericordia y piedad de todos los que enfrentan la pérdida de sus casas. Rogamos que intervengas de una manera maravillosa en sus vidas y atiendas sus necesidades individuales.
Rogamos que bendigas nuestra casa y a nuestra familia, y dejamos nuestras vidas y nuestro futuro en Tus manos bondadosas. Haznos poner los ojos en Ti ante cada eventualidad de la vida, alabarte por Tu bondad y depender de Ti por completo en los días difíciles que tenemos por delante. Rogamos en nombre de Jesús,
Amén.