Padre Celestial amado, gracias porque nos has dado todo lo que necesitamos para vivir de manera piadosa; sin embargo, Señor, también ruego que me concedas sabiduría piadosa y la gracia suficiente para navegar por la vida, con el poder del Espíritu Santo.
Nos has llamado a ser astutos como las serpientes y a la vez inocentes como las palomas; por lo tanto, ruego que me brindes Tu sabiduría práctica, Tu sensibilidad bondadosa y Tu discernimiento sabio que me permitan identificar qué proviene de Ti y qué pretende hacer tropezar a Tus hijos en estos tiempos finales e incluso engañar a los escogidos de Dios.
Padre, sé que en estos días finales la Iglesia se inundará del espíritu del engaño y de muchas enseñanzas contrarias a la Biblia y, Señor, al parecer hoy nos encontramos en esta situación. Sin embargo, Te alabo y Te agradezco porque estoy en Cristo, Quien se ha convertido en la sabiduría de Dios para mí. Alabo Tu nombre porque estoy en Cristo, he sido vestido de Su justicia y he sido redimido por Su sangre.
Ruego que me concedas aquella gracia suficiente y aquella sabiduría piadosa que solo de Ti provienen, para así poder vivir conforme al Señor en un mundo que Te rechaza. Ruego que me llenes de Tu Espíritu Santo, para así poder actuar de manera justa con amor y misericordia, y caminar con humildad ante Ti durante todos los días de mi vida. Ruego en nombre de Jesús,
Amén.