Oración por el fruto de la paciencia del Espíritu

Gracias, Padre, porque durante casi toda mi vida me has enseñado el principio de la espera, y ruego que sigas haciéndolo. Oh Señor, muchas veces en mi vida he rogado que, con Tu gracia, me brindes una paciencia gentil y divina que no intente apresurar el proceso de Tu cosecha espiritual, sino que espere a que la semilla plantada germine y crezca.

Y a pesar de esto, me sigue invadiendo la impaciencia de ver Tu obra terminada. Gracias por la imagen bíblica de la Palabra de Dios, en la cual un granjero espera con paciencia y expectación a que la semilla brote y crezca, como la lluvia temprana y tardía cae a su debido tiempo y como el sol emite sus cálidos rayos sobre los cultivos en letargo.

Ayúdame cada vez más a aplicar esta expectación paciente en mi vida, donde la esperanza no muera y la paciencia no degenere en desesperación.

Ruego que no me dejes rendirme, sino otórgame, Padre mío, paciencia y resiliencia y hazme entregarme de manera pasiva a Tu voluntad perfecta en cada ámbito de mi vida.

Hazme decir con alegría: "Hágase Tu voluntad", y sin importar si decides revelar o no la respuesta final a mi oración perseverante, ruego poder descansar satisfecho, sabiendo que haces bien todas las cosas. Ruego en nombre de Jesús y por Su gloria,

Amén.