Amante Señor, cuánto Te agradezco porque a través de Cristo, Tu Espíritu Santo vive y actúa en mí para Tu gloria y alabanza. Señor, ayúdame a mantener los ojos puestos en Jesús, y a fijar mis pensamientos en las cosas de arriba, no en las cosas que pertenecen a este sistema mundial.
Ruego que me ayudes a no fijarme en las cosas del mundo y a perseguir la justicia, la fe, el amor y la paz, y a ser contado entre aquellos que invocan al Señor con un corazón puro y humilde.
Ayúdame a vivir de una forma que complazca a mi Dios, manifestando bondad hacia los demás y en reverencia hacia Ti.
Ruego que me impidas imitar las conductas de este mundo, más bien hazme asemejarme cada vez más a la imagen del Señor Jesucristo. Ayúdame a mantener los ojos puestos en Él, Que es el Autor y Consumador de mi fe y en Cuyo nombre oro,
Amén.