Padre celestial, cada vez entiendo más a qué se refería el Señor Jesús cuando dijo que Él es uno solo con el Padre y que oró para que Sus discípulos fueran uno solo. Veo que el amor es una hermosa unión del corazón y una dulce comunión del espíritu, y tal como el Padre y el Hijo emanan el mismo amor poderoso, nosotros también hemos de cultivar el mismo amor profundo entre nosotros, a través del poder del Espíritu.
Señor, ruego que el cuerpo de Cristo se una como uno solo y abunde cada vez más en amor a través de la unidad del espíritu, sin poner en peligro la verdad, sino manifestando una preocupación genuina por el otro. Ruego que, a nivel individual y colectivo, podamos vivir de manera piadosa en Jesucristo y busquemos alentarnos y edificarnos el uno al otro, para así tener la misma mentalidad y tener el mismo amor piadoso el uno por el otro.
Ruego que nos unamos en espíritu y en propósito, y que no hagamos nada por egoísmo o vanidad, sino actuemos con humildad y pongamos las necesidades de los demás por encima de las nuestras. Ruego en nombre de Jesús, Que murió por todos nosotros.
Amén.