Padre celestial amado, pareciera que cada vez son más las personas que sienten una mayor ansiedad por lo que hoy ocurre en el mundo y por lo que podría ocurrir, tanto en nuestras naciones como en el extranjero. Por un lado, hay muchas teorías conspirativas; y por el otro, hay mucha propaganda, la cual pareciera estar diseñada intencionalmente para causar ansiedad y temor en las personas.
Sé que no eres un Dios de la confusión ni del temor, sino que de la paz y del amor, pero también sé que la Biblia nos dice que a medida que se acerca el regreso del Señor Jesús a Su Iglesia, los corazones de los hombres comenzarán a desfallecer por miedo a lo que ocurrirá en la tierra.
Señor Jesús, soy Tu hijo y sé que mi fortaleza y consuelo están en Ti. Sé que nunca me abandonarás ni me desampararás, pase lo que pase en este mundo. Ruego que me mantengas lejos de pensamientos ansiosos e impidas que mi corazón tema a lo que va a ocurrir en el mundo, pues sé que mi ciudadanía está en el cielo junto a Ti, y sé que pronto llegará el día en que vendrás a llevarnos contigo a nuestro hogar celestial, donde estaremos junto a Ti para siempre.
Gracias por esta certeza que tengo en Jesucristo mi Salvador,
Amén.
“Pues, ¿qué recibe el hombre de todo su trabajo y del esfuerzo de su corazón con que se afana bajo el sol?”
Padre celestial, cuánto Te agradezco por habernos llevado a salvo al final del día. Te alabo y Te agradezco por la benevolencia y la gran bondad que hoy has tenido hacia nosotros.
Gracias por las numerosas bendiciones y provisiones que hoy nos has concedido, por habernos mantenido a salvo, por habernos guiado y habernos llevado nuevamente a aquel momento del día en que podemos recargar nuestros espíritus y almas a través de un sueño nocturno reparador.
Ruego que me perdones si he dicho o hecho algo que no ha honrado Tu nombre o si he intentado hacer cosas con mi propia fortaleza en lugar de depender por completo de Ti, y Te alabo porque Tu gracia basta y Tu fortaleza se perfecciona en nuestra debilidad.
Y ahora, Señor, mientras nos acostamos, ruego que veles por nosotros, nos protejas y nos cuides. Danos un sueño profundo y reparador, haznos depositar en Ti nuestras cargas o dificultades y no permitas que nuestras mentes se preocupen ni inquieten, pues has prometido llevar todas nuestras cargas si tan solo Te las entregamos. En nombre de Jesús,
Amén.
“Dulce es el sueño del trabajador, coma mucho o {coma} poco; pero la hartura del rico no le permite dormir.”
Padre celestial, he traído ante Ti a todas las mujeres que están embarazadas y todas las parejas que esperan el nacimiento de un bebé en sus hogares. Ruego que protejas a todos los bebés que están formándose en secreto en el vientre de su madre.
Ruego que los protejas, los cuides y les permitas tener un crecimiento saludable mientras se desarrollan en el vientre, y ruego que sus madres reciban la sabiduría y la gracia para evitar las cosas que podrían perjudicar el desarrollo de su hijo no nacido.
Ruego que pongas una barrera de protección alrededor de todos los bebés no nacidos, y que cada vida indefensa se convierta en un bebé recién nacido perfectamente saludable, pues sé que hay muchos problemas que pueden afectar a un niño en el vientre y dañar su desarrollo físico y cognitivo.
Señor, fuiste Tú quien dijo: "Dejen que los niños vengan a Mí, y no se lo impidan"; por lo tanto, ruego que cada uno de ellos nazca en una familia que los ame y los cuide, y que cada uno de ellos se entere de Jesús en los años por venir. En nombre de Jesús,
Amén.
“Como no sabes cuál es el camino del viento, {o} cómo {se forman} los huesos en el vientre de la mujer encinta, tampoco conoces la obra de Dios que hace todas las cosas.”