Padre amado, gracias por reunir una vez más a toda la familia en esta comida. Has sido nuestra fortaleza y apoyo durante todos estos meses, y ahora Te damos gracias porque nos hemos vuelto a reunir alrededor de esta mesa de comida, por lo cual queremos alabar Tu nombre con profundo agradecimiento.
Rogamos que sea un momento de verdadera bendición y comunión mientras compartimos las alegrías y las penas que hemos enfrentado durante el tiempo que hemos estado separados, y que Tu presencia constante permanezca entre nosotros y descanse en cada uno de nosotros durante los meses por venir.
Padre, gracias por la comida que generosamente nos has brindado. Gracias, pues eres un Dios grandioso y generoso. Te pedimos que bendigas nuestra comida, y rogamos que nos acerques el uno al otro y a Ti. En nombre de Jesús,
Amén.