Padre amado, gracias por los padres maravillosos que tengo y por el amor y el apoyo que me han brindado durante toda mi vida. Gracias, Señor, por haberme dado una familia con padres que Te conocen y confían en Ti, y por el ejemplo que han sido para mí durante toda mi niñez e incluso hasta mi vida adulta.
Gracias, Padre, por haberlos elegido para que fueran mis padres y por haberlos usado para hacerme alcanzar una confianza llena de amor en Jesús, mi Salvador. Prótegelos y cuídalos de todo daño y peligro, y concédeles salud y fortaleza mientras envejecen.
Gracias, Padre, por la alegría de mi vida familiar y por el amor y la gracia que he recibido al formar parte de mi familia. Gracias, pues todos somos uno en Cristo y una parte del reino celestial por toda la eternidad.
Dales a mis padres el júbilo de acercarse aun más a Ti con cada año que pase, y Padre, déjame honrarlos en todo lo que haga hasta el final de sus vidas. Ruego en nombre de Jesús,
Amén.