Padre amado, gracias por haber enviado a Jesús para que fuera nuestro ejemplo perfecto de un Hombre piadoso, un Hombre Que demostró que una vida piadosa significa caminar en espíritu y en verdad, en sumisión al Espíritu Santo y en obediencia a Ti, Su Padre celestial.
Señor, oro por todos los hombres cristianos, y ruego que Tu Espíritu de gracia y verdad descanse y permanezca en cada uno de ellos. Ruego que los hombres cristianos puedan crecer en la gracia y el conocimiento de Jesucristo su Señor, y que se vuelvan fuertes en el Señor y en Su inmensa fortaleza, y que no confíen en sus propias capacidades, sino que solo descansen en Él.
Que el hermoso carácter del Señor Jesús se refleje cada vez más en cada uno de ellos, y que los hombres cristianos de todo el mundo sean testigos piadosos de la verdad del evangelio en su hogar y ante aquellos con los que tengan contacto.
Ruego que construyas el cuerpo de Cristo con un ejército de hombres que se conviertan en un reflejo del Señor Jesús, para que así puedan convertirse en hombres poderosos de Dios. Rogamos en nombre de Jesús,
Amén.