Señor celestial, son tantas las cosas que enfrento en la universidad, que apenas tengo tiempo para orar y, Señor, sé que solo una vez que el Señor Jesús sea el foco central de mi vida tendré la provisión suficiente que necesito.
Ayúdame a disciplinarme para pasar tiempo contigo, no en sentido legalista, sino sabiendo que el tiempo que dedique a Ti y a Tu Palabra en comunión y en oración es tiempo bien aprovechado, pues solo al descansar en Ti podrás realizar Tu obra a través de mí.
Señor, también hay muchas distracciones en la vida universitaria, no solo la influencia de los demás estudiantes para desperdiciar tiempo en entretención banal, sino que también a puertas cerradas en el dormitorio, donde abundan las interacciones absurdas por Internet que a menudo pueden arrebatar tiempo importante. Ayúdame a resistir a las tentaciones que parecieran rodearme de día y de noche, más bien libérame, Señor, cuando sucumba a deseos insensatos.
Ruego que me ayudes a mantenerme enfocado en mis estudios y en mi educación, y no me dejes incumplir los plazos que establezcan los varios tutores, y ruego que me des una buena noche de descanso, de forma de estar preparado y renovado para enfrentar el día.
Gracias por los amigos que has traído a mi vida, y Te doy gracias por los amigos y la familia que tengo más allá de las paredes de esta universidad. Ayúdame a ser un verdadero testigo de Jesús y a permanecer firme en mi fe en Ti. Gracias en nombre de Jesús,
Amén.