Oh Señor Dios, me siento débil y cansado, desamparado y desesperanzado. Pareciera que las tinieblas han invadido lo profundo de mi ser. Señor Dios, a veces solo quiero rendirme a la desesperanza, ya que me abate lentamente una oscura depresión y pareciera que es poco lo que puedo hacer para detenerla.
A pesar de esto, sé que esta no es Tu voluntad para mi vida, pues descendiste de los cielos para darnos luz y esperanza, y has dicho que Tu fortaleza se perfecciona en mi debilidad.
Ruego que seas mi fortaleza en mi debilidad. Sé mi luz en mis tinieblas. Sé mi esperanza en esta profunda depresión y sé aquel amor perfecto que elimine el temor y el dolor que yacen en mi corazón, que a menudo intentan rodear mi garganta con su gélidos dedos. Dame una señal de Tu presencia y de Tu cercanía, y ruego que derrames en mi corazón la paz que prometiste a todos Tus hijos, que sobrepasa todo entendimiento.
Señor Dios, ruego que me ayudes en este momento de depresión en mi vida, pues en el fondo de mi corazón sé que solo Tú eres mi única esperanza. Señor, sácame de esta depresión devastadora y llévame de vuelta a una comunión estrecha contigo. Creo firmemente que cuando mis pensamientos están enfocados en Ti, es improbable que aquella depresión invada mi paz. Ayúdame a enfocar mis pensamientos en Ti y en Tus muchas promesas hermosas. Ruego en nombre de Jesús,
Amén.